Los arroceros de varios departamentos productores han manifestado su inconformismo frete a la manera como el gobierno está dilatando los compromisos adquiridos con los arroceros.
En el marco de la Audiencia
Pública sobre el arroz y los distritos de riego, líderes gremiales, productores
y campesinos de los departamentos de Tolima, Huila, Casanare y otras regiones
del país, que participaron en la audiencia.
A pocos días del vencimiento
de la resolución que estipula el incentivo a la comercialización, plazo que
finaliza el 30 de junio, ningún agricultor ha recibido el apoyo, debido a que
el operador encargado ni siguiera a sido designado. Esta negligencia pone en
riesgo no solo la sostenibilidad de las cosechas actuales, sino también la
confianza del sector en el cumplimiento institucional.
A esto se suma la total falta
de información sobre la fijación del precio del arroz para el segundo semestre.
Hoy, el precio por carga se ubica en $185.000, pero circulan versiones no
oficiales que anuncian una reducción a $165.000. Todas estas incertidumbres
generan situaciones altamente preocupantes par la productividad y la economía del
gremio arrocero del país., ante la falta de garantías.
A este panorama se suman otros
aspectos fundamentales para la estabilidad del gremio, una política clara de
exportación, el abandono de los distritos de riego, y la falta de incentivos a
la comercialización. Los arroceros durante toda la audiencia denunciaron el
incumplimiento sistemático de los acuerdos pactados en marzo de este año, un
hecho con el que advierten, pone en riesgo la viabilidad del cultivo de arroz y
la seguridad alimentaria del país.
Gabriel Núñez, Líder arrocero
y gerente de Coagrodistritos, veraseó “Ha habido un incumplimiento total. Nada
se ha cumplido, ni en Tolima, ni en Huila, ni en ningún otro departamento.
Hemos insistido en que el Ministerio de Ambiente ausente hoy instale mesas
técnicas urgentes para revisar la tasa de uso del agua en el sector
agropecuario. Si no hay compromisos serios hoy, entenderemos que se están
burlando del campesinado colombiano”.