Es preocupante para los pescadores que ejercen sus labores en el Rio Magdalena a su paso por la frontera entre los municipios de *La Dorada, en Caldas, y Puerto Salgar, en Cundinamarca, han evidenciado que el nivel del cauce es tan bajo que pueden atravesarlo caminando.
El
mayor temor es que de continuar la fuerte ola de calor siga secando el cauce y
se genere una escasez de peces y de agua en esa región del Magdalena Medio.